Los coachs de seducción han proliferado bastante en los últimos años. Muchos gurús de la seducción han querido brindar sus servicios para enseñar a ligar, aunque son pocos los que realmente ofrecen un buen servicio. Quienes lo hacen, son auténticos profesionales con conocimientos sobre psicología que pueden hacer muchísimo por las personas.
¿Es eso posible? Desde luego que sí. De hecho, acudir a un buen coaching de seducción puede ser la mejor forma de acabar con ese lado introvertido que tanto te lastra, para ganar las habilidades sociales y comunicativas que siempre has querido tener. Pero no adelantemos acontecimientos. Vamos a ver qué es exactamente un coaching de seducción y qué beneficios te puede aportar.
¿En qué consiste el coaching de seducción exactamente?
Contar con un Coach de seducción es contar con un experto en la seducción que busca ayudar a las personas a entender mejor este arte, pero sobre todo a entenderse mejor a ellas mismas y a quienes les rodean. Existen muchos métodos diferentes, pero todos ellos suelen responder a las mismas necesidades y preguntas. Se orientan a aquellos hombres que tienen medio de acercarse a una mujer para intentar seduciarla, a quienes no saben cómo iniciar conversaciones, a quienes les cuesta enamorar a esa persona que les gusta o, incluso, a quienes simplemente necesitan dejar atrás la timidez.
Como decimos, hay muchas técnicas diferentes para ello. Y no hay que confundirse, el buen coaching de seducción no trata de enseñar trucos para ligar, técnicas baratas o frases más que requetemanidas. La clave de un buen método es ayudar a la persona a conocerse mejor, a ganar confianza en sí misma y a pulir sus dotes comunicativas, su don de gentes, para poder acercarse a las personas que le atraen e intentar conquistarlas sin miedo al rechazo.
Porque la clave, principalmente, radica en ser tolerante con uno mismo, descubrir el potencial que se tiene y hasta dónde se puede llegar, la capacidad para sacarse más partido y verse atractivo, como también afinar las dotes para conectar con otras personas, aprender a entablar conversaciones, a eliminar el estrés de conocer a alguien nuevo para convertirlo en algo divertido e interesante. Es algo que lleva a un cambio de mentalidad que sí, busca ayudar a ligar, pero sobre todo busca hacer que las personas se sientan mejor consigo mismas.
A esto se llega a través de un buen coach de seducción, de un profesional o profesionales que expliquen conceptos teóricos, ofrezcan información, resuelvan dudas e incluso propongan dinámicas individuales o de grupo para empezar a abandonar la zona de confort y experimentar cosas nuevas. Fundamentos, acercamientos, simulaciones de citas… El abanico es enorme, y cada coaching busca su forma de hacerlo propio con metodologías diferentes, pero siempre enfocadas en la misma dirección.
Beneficios de contar con un buen coaching de seducción
Viendo en qué consiste exactamente la labor de los coachs y del coaching de seducción, es fácil ver cuáles son los principales beneficios de recurrir a esta especie de cursillos. Los más destacados, sin duda alguna, son los siguientes:
Mayor autoconfianza
Una de las prioridades de la enseñanza en materia de seducción es hacer que la persona se conozca mejor. Tendrás que descubrir tus defectos, pero, por encima de todo, tendás que conocer cuáles son tus virtudes, tus puntos fuertes. Son lo que más necesitarás para intentar seducir a cualquier persona, así que no tardarás en ganar más confianza en tus cualidades.
Y es que es precisamente la confianza la que más ayuda a ser un mejor seductor. Es algo que se desprende, que se necesita para conquistar a una persona. Se va forjando poco a poco, gracias a las técnicas y enseñanzas del coach, pero tarda poco en salir. Cuando quieras darte cuenta, verás que conoces mucho mejor de lo que eres capaz y, sobre todo, que sabes sacarle partido sin miedo alguno. Te sentirás mejor contigo mismo.
Mejores dotes sociales y comunicativas
Es imposible seducir sin conversación, sin tener dotes de comunicación tanto verbal como no verbal. Una expresión, una frase, un gesto. Todo cuenta en este arte. Pero lo mejor es que, al aprender en este campo, no solo lo dominas para conquistar a alguien. Al final, acabas desarrollando una serie de habilidades sociales que te permiten entablar conversación con prácticamente cualquier persona.
Si recurres a un buen coach de seducción, no te limitarás a aprender cómo romper el hielo con una mujer. Lo que aprenderás será a tener una mayor facilidad de palabra, a ampliar tu abanico de temas de conversación y a ver cómo mantener una buena charla con una persona. ¡Te puede ser útil incluso a nivel profesional!
Resultados en poco tiempo
Un buen coaching de seducción da resultados rápidos. No vas a tardar en notarte diferente, en notar que te ves más capaz de afrontar desafíos que antes te parecían impensables. Lo mejor de todo es que no solo perderás el miedo a hablar con personas que te resulten atractivas, también perderás el miedo a socializar con más personas, a abrirte más a la sociedad.
En definitiva, tardarás muy poco en sentirte mejor contigo mismo.
