Hacerse mayor es irremediable para cualquiera, sin importar si apenas llegamos a final de mes o si somos Jeff Bezos. Si tenemos la suerte de seguir cumpliendo años, cada día que pase seremos un poco más mayores y tendremos más probabilidades de sufrir problemas de salud asociados.
Cumplir años siempre es algo positivo, aunque conforme seamos más mayores tendremos más limitaciones en nuestro día a día. Una de las enfermedades más extendidas en personas de la tercera edad es la demencia.
Demencia
Cuando hablamos de demencia, debemos referirnos a una alteración o trastorno de la memoria, toma de decisiones que afecta a la vida cotidiana de una persona. Para referirnos a demencia no se suele utilizar el término enfermedad, sino un síntoma o una alteración.
Residencias para enfermos con demencia
Sufrir demencia es duro a nivel psicológico, sobre todo para las personas que nos acompañan. En este caso, los familiares directos son los que sufren directamente las consecuencias de la demencia, porque deben encargarse por completo del cuidado y la asistencia de la persona.
No obstante, hay profesionales que también se encargan de este tipo de cuidados. En concreto, la mejor opción es apostar por residencias para demencia con el objetivo de que la persona mayor pueda obtener unos cuidados especiales y tenga una atención personalizada de un equipo clínico.
En este tipo de establecimientos se encargan de las tareas diarias, analizando y cuidando al paciente logrando una mejora de su alteración. La intención es mejorar la calidad de vida del paciente y reducir los síntomas poco a poco, mediante actividades diarias que refuercen el nivel cognitivo del propio paciente.
Riesgos de demencia
¿Qué factores se relacionan directamente con la demencia? Seguro que asocias demencia con personas mayores y, a decir verdad, la edad es uno de los factores más importantes para vincular esta alteración.
Sin embargo, la edad no es el único factor para relacionar la demencia sino que también encontramos la raza, la salud cardiovascular o las lesiones cerebrales. Vamos a explicarlos todos a continuación.
Edad
La mayoría de casos de demencia se observan a personas de 65 años o más, aunque no los únicos. La edad es uno de los factores más importantes para el desarrollo de la demencia.
Salud cardiovascular
Los problemas cardiovasculares son factores que afectan directamente al riesgo de sufrir demencia. Por ello, las personas mayores con problemas de obesidad, diabetes u otros problemas cardíacos pueden llegar a sufrir demencia.
Raza
Las personas de raza blanca tienen la mitad de probabilidades de sufrir demencia que los afroamericanos. Aún no se ha descubierto por qué de esta probabilidad, pero es algo bastante habitual.
Factores genéticos o familiares
Uno de los factores que más se relacionan con la demencia es tener familiares directos que han sufrido esta alteración o trastorno. Si tienes padres o hermanos que hayan sufrido demencia, es probable que en el futuro puedas también sufrirla, aunque no siempre es así.
Lesión cerebral traumática
Las lesiones cerebrales pueden aumentar el riesgo de sufrir este trastorno, sobre todo si son graves reiteradas.